La villa presenta constructivamente características extremeñas y en particular de la comarca de La Serena, calles amplias y edificaciones de una sola planta, con cuadra para las caballerizas y doblado para guardar las cosechas y chacinas.
Fachadas encaladas, que se renuevan todos los años y elementos de granito.
En diversas fachadas de vivienda de la villa se encuentran escudos de granito y mármol, que testimonian su hidalgía, son emblemas de titulos que ostentaron los ilustres veciones en el sigl XVII y XVIII. Éstos poseen claras alusiones a la Orden de Alcántara y pertenecieron a los Condes de Montalbán y a los Campos de Orellana, entre otros.
El monumento más importante es la iglesia parroquial de San Juan Bautista, otra de gran cuerpo sobre terraza, constituye una constitución de mampostería y sillares con planta de cruz latina, que e presenta exenta, sobreelevada sobre un espacio circundante constituido por diversos ámbitos a diferentes alturas. Consta de una sola nave compartimentada en cinco tramos, con bóveda de cañon con lunetos. El presbiterio, de gran cuerpo y mayor elevación que el resto de la nave , está cubierto por una cúpla de media naranja construida sobre pechines y en ladrillo visto igual que el tramo adyacente de la nave, esta cúpula exteriormente se manifiesta por el cuerpo cuadrangular que la envuelve
Al exterior destacan unos poderosos contrafuertes y algunas ventanas de medio puntom todo en sillería. Sobre ambos costados se abren sendas portadas iguales, de diseño clasicista, consistentes en arcos almohadillados de medio punto flanqueados por pilastras con bolos y frontón superior rematado en cruz y medallones en las enjutas, de diseño renacentista.
En la fachada frontal, que no ostenta portada por hallarse cegada la originaria, se encastra una torre cuadrada de sillares, con ventanas de medio punto a las cuatro caras en el cuerpo superior.
La cabecera es de testero plano con escasa profundidad. A ambos lados se sitúan la Sacristía y la Capilla del Sagrario, configurando los incipientes brazos de la cruz. El pavimento también es de granito, pero actualmente está cubierto de terrazos artificiales.
Entre sus contenidos merece citarse una buena talla del siglo XVI de la Virgen la Valvanera, conocida popularmente entre los vecionos como "la Verveneda", imagen sedente con el Niño Dios en brazos sobre un águila, que tuvo mutilada la cola, debido a la mano atrevida de algún indocumentado, a día de hoy restaurada.
Otro edificio a tener en cuenta es el Convento, fundado y edificado por los condes Campos de Orellana como asilo-hogar para los ancianos.
A 9 km. de la localidad y enclavado en un típico paraje de estas tierras, se encuentra el puente sobre el río Ortigas, consta de 6 arcos de medio punto, realizados en piedra, es de presumible origen romano, aunque sin documentar y reconstruido en la Edad Media.
Hoy en día ya no cumple sus funciones de antaño, ya que se ha construido un puente alternativo.
Por cualquiera de estos dos puentes se accede, recorriendo otros dos kilómetros a la ermita de Ntra. Sra. de la Antigua, lugar de celebración de romerías populares.
En el año 1.400 ya existía. Se encuentra rodeada por un cerco, ligeramente trapezoidal, al recinto se entra a través de dos puertas situadas ambas en el lado oeste de dicho cerco, siendo la más antigua la que se encuentra en la parte izquierda, que conserva su estructura de cantería. En el centro de este mismo lateral del cerco encontramos otra puerta a modo de arco apuntado, que data de 1926 y cerrada con artística puerta de forja, obra de Migel Chamizo.
El templo está constituido por cuerpo, capilla, camarín posterior y soportales, diferenciándose estas partes desde el exterior por ser una superposición de distintos volúmenes a diferentes alturas. Al templo se accede a través de dos puertas una situada en la cara oeste y otra en la cara norte del mismo. En esta construcción encontramos un arco total y crucero de cantería de bóveda todo el cuadro de la Capilla.
Cuenta con un elemento poco habitual en este tipo de construcciones, una torre de 25 escalones separada del cuerpo principal, edificada en mampostería de barro, piedra y sillares, se divide en dos cuerpos por medio de una sencilla imposta, como remate superior el campanario, techado con cubierta de madera a cuatro vertientes. Esta torre se une al cuerpo principal por los soportales citados anteriormente, los cuales están compuestos por una sucesión de arcos de medio punto.
El suelo de la ermita y el porche que la rodea es de granito. En su interior cabe destacar una reliquia romana que encontramos situada tras la puerta situada en la cara norte del templo, es una pila del agua de purificarse, hecha vaciando un pedestal romano de granito.
A través de la Sacristía accedemos al Camarín de la Virgen, que está decorado con frescos donde se representa la leyenda de cómo se apareció la virgen en este lugar a un pastor.
Presidiendo el altar, en el ventanal del camarín, esta situada la virgen, Ntra. Sra. de la Antigua, la imagen actual reproduce la anterior y data de 1.941. Lo más destacable es que tanto la Virgen como el niño forman un solo bloque, de tal manera que el niño viste la misma túnica que la madre. Se encuentra casi todo el año en su Ermita, salvo del 13 de agosto, que es trasladada en peregrinación por los vecinos del pueblo a la iglesia de San Juan Bautista, al 13 de septiembre que de la misma forma es llevada de nuevo a su Ermita.
Otros testimonios que hacen patente la existencia en ese lugar de asentamientos remotos en la zona, son, además de la reliquia romana mencionada anteriormente, numerosas tumbas antropomorfas excavadas en la roca que proliferan en las inmediaciones, que se creen son restos ibéricos.